Grupos católicos y Cáritas trabajan para colaborar con quienes más lo necesitan.
A una economía golpeada por años de recesión económica, se sumó el Aislamiento Social que impidió a muchas personas poder contar con los recursos necesarios para sustentarse. Ante este panorama, la presencia y las acciones de la Iglesia siempre ha sido uno de los principales sostenes para atender una realidad social angustiante.
Frente a un panorama que seguirá extendiéndose, desde la Parroquia se definieron acciones para atender a los más necesitados de la ciudad. Cumpliendo todos los protocolos de distanciamiento social, los grupos de la Parroquia San Andrés y sus capillas continúan trabajando para asistir a vecinos de distintas zonas de Miramar.
Los voluntarios están haciendo barbijos para las familias que así lo requieran. También se distribuyen bolsones de mercaderías junto con Cáritas para asistir semanalmente a más de 100 familias. Días atrás, desde la organización católica lanzaron una convocatoria a colaborar para poder contar con cajas de alimentos no perecederos para 250 familias de Miramar (aceite, puré de tomates, fideos, arroz, polenta y leche), quienes puedan sumarse pueden hacer llegar los alimentos al templo ubicado en calle 29 y 22.
"Se realiza un trabajo de contención a las personas más vulnerables para poder asistirlos con las necesidades, especialmente de los mayores que no pueden salir" explicaron desde la Parroquia San Andrés.
Nos interesan tus comentarios