Este suceso ocurrido el 9 de septiembre de 1904 fue rescatado por el AGN.
El Archivo General de la Nación recordó hoy que hace 111 años este velero, que fue construido en 1893 por D.& W. Henderson & Co, de Glasgow, para la Corunna Sailing Ship 'Co. Ltd, integrando la flota del Capitan Hardie, bajo el comando del Capitán John Mason, con quien, procedente de Amberes con destino a Puget Sound, varó en Miramar el 9 de septiembre de 1904.
La nave llevaba más de 3.000 toneladas de cemento, según describen los cronistas de la época, los buques que fueron en su ayuda fueron el aviso Tehuelche, del Puerto Militar, los remolcadores Malvinas, Ebro y varios lanchones para salvataje de Angel Gardella y, por su parte, Mihanovich despachó al remolcador Gladiador y la lancha Necochea.
Debido al mal tiempo, los tripulantes se desesperaban, incluso uno salto al mar para tratar de llegar a nado, llamado N. Hamsen, de Noruega, pero se ahogó en el intento. La fragata tenia uno de los compartimientos lleno de agua y debía aligerar por lo menos la mitad de la carga para poder intentar flotar, aunque tenía alrededor 15 pies de agua. Finalmente, se pudo sacar a la tripulación y se abandonó el buque.
El Corunna fue finalmente zafado y llevado a Montevideo donde quedó como depósito y pontón carbonero durante años en ese puerto, abandonada por los seguros de los salvadores por pensar que las averías no justificaban una reparación. Pero era un excelente barco, y la firma Ballesty y González, con la participación del Ministro de Marina se encargaron de repararlo. Al ocurrir la primera guerra mundial y ante la falta acuciante de bodegas, la empresa francesa Boillart de Boisguilbert la compro en 74.000 libras, un precio 40 veces mayor que lo que se hubiera pagado un año después. La empresa Oriental Navigation Corp. de Nueva York, formada por Dodero para fletar buques, contratar fletes neutrales y compra y venta de buques (compañía que funciono hasta 1924) se hizo cargo del equipamiento y lo rebautizó "La Epoca", con bandera uruguaya, fletándolo a Europa.
Pero el 29 de Octubre de 1917, navegando de Nueva York a Burdeos con 1.400 toneladas de tabaco, acero, clavos, aceite lubricante y 1.200 rollos de papel para diarios, fue interceptado por el submarino alemán U-93, cerca de Gironda, Francia. Le disparó once cañonazos sin hundirlo, finalmente lo abordó, le retiraron elementos valiosos y le colocaron explosivos, que lo terminaron finalmente. Los tripulantes fueron rescatados esa misma noche por dos balleneras.
Nos interesan tus comentarios